Ideas en venta (fragmento) :

jueves, agosto 24, 2006

de Jorge Ibargüengoitia

“El excéntrico es una persona que a nadie se le ocurriría meter en un manicomio, pero que tiene ciertas peculiaridades que lo distinguen claramente del común de la gente. Para ser excéntrico se necesita cierta iniciativa, cierta pasión creadora, pero al mismo tiempo supone una falla o una deficiencia, que lo separa fatalmente, al excéntrico, del artista. Es excéntrico, por ejemplo, el señor que un día descubre, gracias a algún razonamiento bastante complicado, que la habitación ideal debe ser hexagonal, y construye una casa hexagonal, figura geométrica predilecta. Un individuo que invente una casa hexagonal, pero no la construya, o que una vez construida no la habite, es un excéntrico manqué. Otra cualidad indispensable del excéntrico es que el resultado de sus locuras debe ser inofensivo para los demás. El único perjudicado debe ser él mismo. El único excéntrico que he conocido –y reconocido como tal– era un tío político mío. Uno de los hombres más listos y más industriosos que he conocido. La profesión más antigua que yo le conocí fue la de administrador de una fundición; cuando se aburrió puso una fundación artística –todo esto en un pueblo en donde no había ni un solo escultor–; cuando cerró la fundición puso una planta avícola en la sala de su casa –en su buró había un nido de palomas mensajeras–; después abrió una fábrica de licores e inventó una crema, muy parecida al chartreuse, que se llamaba crema Vergine; después compró un caserón y pasó varios años reformándolo –él solo, sin ayuda de albañil– y cuando terminó la alberca, otro tío mío me dijo:

–¿Tú crees que va a llenarla con agua de la llave? Nada de eso. Va a comprar un tanque de oxígeno y dos de hidrógeno y va a producir su propia agua.

Y aquí hemos llegado a otra característica de los excéntricos, que consiste en una capacidad fuera de lo común para inspirar leyendas. Un excéntrico rodeado de malos observadores o de gente que lo considera normal está perdido.”

6 comentarios:

ecasual dijo...

Me parece una descripción muy acertada.
Gracias por el enlace, que es recíproco.
Saludos.

julio cesar dijo...

hola q tal, ando visitando blogs, desde el planeta becerril, y llego por aca , buenos escritos saludos

Sovka dijo...

HOLAAAA!!!!!
GRACIAS por incluirme en esa antología. Yo también siempre ando por acá :)

Un abrazo.

alejandra dijo...

hormiguita: de nada de nada, tus frases sabias me alimentan día tras día =)

julio cesar: bienvenido! el planeta becerril es bello, al rato te visito a ti! =)

sovka! de nada mujer! recibe un abrazo de vuelta! =)

Lety Ricardez dijo...

Querida Opphelia, he disfrutado el texto, la definición y la imagen de excentricidad, ¡¡quien lo fuera!! pero sin estar rodeados por gente que me considerara normal,

Ahora debo parecerlo un poco con mi gorrita para tapar la falta de pelo.

Indianguman dijo...

jajaja delicioso texto. El mundo no sería el mismo sin esos bichos raros...

Un beso